Tras las entrevistas realizadas a los diferentes educadores sociales y orientadores de los institutos, se ha podido comprobar qué una gran mayoría conoce el problema tanto de acoso escolar como de ciberacoso aunque se necesita más difusión en este último tanto por los medios como en los colegios. “Yo creo que es un fenómeno que viene relacionado con las nuevas redes sociales y con la nueva forma de comunicarse, sobre todo entre los jóvenes. Cuando se produce en el anonimato puede dar lugar a este tipo de situaciones de acosos, que se denominan ciberacoso ya que se producen a través de internet”, explica el orientador del IES Pedro Mercedes, Luis Aillón.

 

Otro de los puntos principales es la forma en la que se hace frente a este problema en los institutos, tanto los directores como orientadores apuntan que este es un tema que se intenta solventar desde dentro del centro mediante la realización de charlas a través de personal externo. “Nosotros tenemos unas normas de convivencias y en ellas está contemplado cualquier tipo de acoso y entre ellos, el ciberacoso que está penalizado con una falta grave (privación de algunos días de clase). Esto se les da a los chicos mediante sus tutores y lo que hacemos es intentar concienciarles de lo duro que es esto para las personas que lo sufren. También traemos a personas que dan charlas, como la policía local, y a nivel legal se les explica las consecuencias que pueden tener. Antes venían más asociaciones a informarles ya que estaban subvencionadas pero ahora mismo eso ya no existe”, apunta el orientador del IES Fernando Zóbel, Rafael Fuero. Este orientador hace referencia al aumento del ciberacoso tras la masiva utilización de las redes sociales, “las cosas tienen una trascendencia que no tenían anteriormente. Cualquier problema que surge, a través del móvil (WhatsApp) y mediante redes sociales, se hace partícipe a los demás centros de Cuenca. Nos hemos encontrado situaciones que siendo un problema puntual a las dos horas teníamos ahí fuera a 10 o 15 personas de otros centros para solucionarlo de aquella manera”.

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Rafael Fuero nos comentaba que durante la Semana contra el Acoso Escolar en noviembre, se realizan una serie de actividades en las que el estudiante participa en la encuesta anual sobre acoso escolar, así como actividades de sensibilización, tales como concursos de carteles y concursos de escritura. Hay actividades para cada edad, pegatinas para llevar puestas y películas para ver. La escuela incluso hace su propio video contra el acoso escolar con un tema elegido por los estudiantes.

 

A continuación se pueden mostrar algunos de los carteles realizados por los alumnos en los distintos Institutos de Secundaria de la ciudad de Cuenca. 

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Los tres centros afirman que la mayor parte de los alumnos que sufren ciberacoso, cuando están en una situación difícil y desesperada, se ponen en contacto con los profesores y que ellos actúan como mediadores para intentar solventar el problema. El director del IES Lorenzo Hervás y Panduro, Fernando Palomares, recalca la diferencia que hay entre una discusión de patio y algo más grave, “conviene diferenciar entre lo que sería una discusión de patio, o una discusión por WhatsApp, un comentario desafortunado, o un insulto directo (sin quitarle importancia) y entre una situación sistemática con intención de hacer daño, en la que se organizan. Hemos tenido alguna situación que tenía ese riesgo, no tanto por hacer daño, como por dejarlo fuera, creas un grupo y la forma de molestar a alguien es dejarlo fuera de ese grupo, haciendo esa especie de vacío, ahí puede empezar el ciberacoso”.

Estos tres institutos aseguran tener un porcentaje bajo de ciberacosados ya que, en el último año, el IES Lorenzo Hervás y Panduro y el Pedro Mercedes han tenido un único caso, en los que ellos hayan intervenido, y el IES Fernando Zóbel han sido tres los casos que se han llevado a cabo.  

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Por otra parte, el orientador del Instituto San José, Jesús Torres nos quiso responder a una serie de preguntas tales como: En la cuestión de que se detecte algún caso, ¿se lo comunicáis a los padres o directamente tenéis que denunciar?, ¿se suele detectar el problema de forma rápida o cuando ya se llega a un punto de gravedad bastante alto?, ¿qué perfil presentar la víctima y el agresor?, entre otras.   

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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